FELICIDAD...

Como una pequeña definición a ésta palabra, según mi diccionario, dice: “Situación del ser para quién las circunstancias de su vida son tales como las desea”. Lo cual parece que está evocada al tener o alcanzar alguna cosa, y donde me lleva a pensar en que esa felicidad esta regida por lo que deseamos y lo alcanzamos efectivamente.

Bueno, en mi humilde opinión ésta definición sobre la felicidad se desvanece a las pocas horas, porque está sujeta a lo material, lo cual dura poco o dura lo que te duró la emoción. Son como momentos detenidos, como una fotografía o una encuesta que solo dura lo necesario, y luego de ser, solo queda la nada misma. Como un estado en que las emociones viajan desde una zona central y se dispersan por el cuerpo dando como resultado la felicidad. (Solo divago)

Conversando con algunos amigos, saqué varias ideas de cómo ven las personas ésta palabrita que tanto bien nos hace, como por ejemplo que existen personas que buscan la felicidad en el conocimiento y que solo encuentran desilusión, o la felicidad que se busca al viajar y sólo encontrar el cansancio, o en el dinero y encontrar discordia y preocupación, o en los escritos y solo encontrar fatiga. Bueno a veces son hasta necesarias.

Pero éstos días que tuve que descansar, leí algunos libros y encontré unos escritos bien interesantes y muy elocuentes, como por ejemplo: “Nada hace que la felicidad sea más inalcanzable que tratar de encontrarla”, y otras citas que me llamaron la atención, y medité sobre aquello, y llegué a una conclusión pero llevándola hacia la vida de un cristiano y pensé que aunque existan descontentos y tristezas que la vida nos pueda dar, y que son parte de ella por lo demás, la felicidad es algo constante o debiera serlo por lo menos, y que se refleja en tu actuar, tu mirar, tu forma de ver las cosas, una especie de motor que nos impulsa a seguir adelante, esa felicidad que nos causa el saber que le tenemos a Él y que por Él estamos, aunque llevemos lo puesto.

Aunque sé que muchas veces es difícil llevarlo, porque somos además carta abierta al mundo, muchas veces estamos en el ojo del huracán, esperando que las personas nos indiquen con el dedo, tratando de no caer, de estar bien, de ser fuerte, y…..uuufff, muchas veces hemos llorado, reído, saltado, caído, etc., pero igual somos felices.

Y yo?, bueno dentro de todo, si soy feliz, con todo lo que he aprendido y las experiencias que la vida me ha presentado. A pesar que estoy más madura, sigo llevando esta felicidad media infantil, jajajajaja, pero que está clavada en mi corazón. Luchando día a día para que esa felicidad se mantenga en mi corazón. A veces cierro mis ojos y canto, canto y canto, sí, canto de felicidad, esa felicidad que no la da lo material como ese anillo por el cuál morí alguna vez, aunque suene frío y superficial, pero es que somos tan solo mortales, queriendo llevar esta carrera como corresponde, jajajajajaja, aunque muchos amigos me digan que estoy mal y que me pierdo de todo, jajajaja. Bueno la diversidad es genial, las opiniones me encantan, porque puedes enriquecerte más o simplemente rechazarlas en tu mente.

Y si mi felicidad está lejos de mi país conforme a lo que el Señor me muestre, lo haré, si no bueno, esperaré con mis proyectos acá, trabajando, luchando y esperando por Él.